1. Leche con cereales
La vitamina B1 que contienen ambos elementos logra que nuestro cerebro produzca serotonina, un neurotransmisor que se relaciona directamente con el buen humor. Además, es una excelente opción para integrar al desayuno, la comida más importante del día.
2. Helados y chocolate
De acuerdo a un estudio de la Universidad de Maryland, ambas comidas contienen triptófano, un aminoácido que tiene la capacidad de calmarnos y aumentar también la producción de serotonina. Sin embargo, cuídate de no ingerir grandes cantidades ya que su alto contenido calórico puede influir en tu peso.
3. Fresas
Esta fruta se caracteriza por tener un sabor muy similar al ácido valproico, un medicamento que se receta a las personas que sufren de depresión. Si no te gustan las fresas, también puedes optar por el salmón, las nueces y el té, que poseen la misma característica.
Las algas marinas son el complemento ideal para preparar una buena ensalada. Tienen una alta dosis de iodina, un nutriente esencial para el buen funcionamiento tiroideo, evitando que te venza el cansancio y la tristeza.
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